Almidón resistente
El almidón resistente es un tipo de almidón que no se digiere complemente por nuestro organismo, por lo que, actúa de manera muy parecida a la fibra ejerciendo un efecto prebiótico, ya que alimenta las bacterias intestinales y por lo tanto, reforzando así nuestro sistema inmunológico.
El almidón es la forma en que las plantas almacenan su energía, cuando cocinamos las patatas, boniatos, el arroz o los cereales, ese almidón se transforma y nuestras enzimas lo digieren con facilidad y nuestras células aprovechan rápidamente su energía.
Sin embargo, si enfriamos los alimentos, se modifica su estructura y se transforma en un almidón resistente al proceso digestivo, las enzimas no son capaces de romperlo y queda disponible para que las bacterias probióticas del intestino lo utilicen como sustrato.