La sidra
La sidra es una bebida alcohólica de baja graduación fabricada con el zumo fermentado de la manzana. Se trata de una bebida muy extendida por todo el mundo, así en Europa se encuentra en numerosos países: Alemania, Francia (Calvados), España (Asturias, Cantabria, Galicia y País Vasco, así como varias comarcas de Castilla y León), Italia (Piemonte), Irlanda, Escocia e Inglaterra…
Por su singularidad hay que diferenciar la sidra natural de la espumosa. En general, mientras en el norte de España se consume mayoritariamente la sidra natural, en el resto el mundo se acostumbra a consumir la sidra espumosa (que asemeja más al champagne o a la cerveza).
El Origen de la palabra sidra, viene de griego sikera. Al latín pasa como sicera y en asturiano se empezará a pronunciar sizra y luego finalmente sidra. Son muy numerosos los documentos a lo largo de la historia que nombran la sidra y los pomares (plantaciones de manzanos).
Existen diferentes tipos de sidra:
- Sidra dulce: zumo que sale de exprimir la manzana y que habitualmente se hace después de la recolección de la manzana en octubre.
- Sidra natural: sidra tradicional que se consume escanciada y se trata de sidra dulce fermentada sin azúcares añadidos.
- Sidra de nueva expresión: sidra natural con un perfil organoléptico diferente creada con vistas a la expansión a nuevos mercados.
- Sidra de hielo: se obtiene de la fermentación del zumo de manzana congelada naturalmente. De este modo se consigue una mayor concentración de azúcares y se obtiene una bebida de mayor graduación.
La sidra tiene que servirse fresca, nunca fría, en torno a los 10-12º de temperatura.
Aporta aproximadamente 4 g de alcohol y 4 g de azúcares por cada 100 g de alimento por lo que su contenido energético es de 43 kcal/100 g.