¿Sopa en verano?
Asociamos la sopa, las cremas y los guisos de cuchara al invierno no solo por el aporte de calor de este tipo de platos tan apetecible cuando hace frio, sino también por el aporte de nutrientes de manera cómoda, aprovechando el tomar numerosas vitaminas en una sola cucharada.
Sin embargo en verano, y debido al calor, solemos abandonar este tipo de comidas. Para no dejar de incorporar las vitaminas y minerales de las verduras en verano, os ofrecemos ideas de sopas frías para tomar en esta época del año.
GAZPACHO: es la sopa fría por excelencia de todos los veranos. Cada familia, o cada casa lo hace de manera diferente, algunos con cebolla otros sin otros no le ponen pimiento otros si… pero en rasgos generales, el aporte de vitaminas y minerales gracias principalmente al tomate hace que sea una opción saludable y baja en calorías.
RECETA:
1 Kgr de tomates rojos (maduros)
1 pimiento
1 pepino
1 diente de ajo
AOVE
Vinagre
Sal
Se trata de pelar y cortar todos los ingredientes y mezclar hasta que se forme un líquido homogéneo.
TRUCOS: si añadimos el aceite después de haber mezclado el resto de ingredientes, y removemos sin batir, evitaremos que la mezcla se torne a color naranja y mantenga el rojo intenso de los tomates.
Además podemos añadir una pizca (como si estuviésemos echando sal) de pan rallado, nos ayudará a que la mezcla no se divida en fases debido al agua que suelta el tomate principalmente.
SOPA FRIA DE ZANAHORIA, NARANJA y JENGIBRE: una sopa fría llena de nutrientes. Nos ayuda a cuidar la piel, tan castigada en esta época del año, gracias a los carotenos de la zanahoria, y la vitamina C de las naranjas.
RECETA:
Un manojo de zanahorias
Dos naranjas
Dos puerros
AOVE
Sal
Jengibre en polvo (una cucharadita)
Pelamos las zanahorias y los puerros y los rehogamos con un poco de aceite de oliva virgen extra. Dejamos que se cocine y se dore, añadimos un poquito de caldo de verduras para que cueza un poco hasta que se ablande la zanahoria. Añadimos el zumo de dos naranjas y la corteza y batimos hasta que la mezcla sea homogénea. Añadimos una cucharadita de AOVE, una pizca de sal y el jengibre en polvo, volvemos a batir y dejamos en la nevera hasta enfriar.
CREMA DE CALABACIN Y PUERRO; pese a que puede parecer una crema típica del invierno… debemos probarla fría, nos puede sorprender por su sabor y aprovechar si nos estamos cuidando en verano por su bajo contenido calórico.
RECETA:
Tres calabacines grandes
Tres puerros
Un yogur natural
Sal
Aove
Pimienta
Cortamos los puerros y los calabacines en trocitos y los dejamos dorar con un chorrito de AOVE, cuando el calabacín haya soltado todo el agua, añadimos el yogur y batimos.
En caso de no haber soltado mucha agua, podemos añadir un chorrito de caldo de verduras antes de añadir el yogur y mezclar todo. Aderezamos con sal y pimienta.
Dejamos enfriar en la nevera aproximadamente dos horas antes de servir.
SOPA FRIA DE REMOLACHA: la remolacha aporta grandes propiedades antioxidantes y fibra, por lo que es una
opción muy recomendable para esta época del año.
RECETA:
Una bolsa de remolacha cocida
Una cebolla
Un pepino
Un diente de ajo
AOVE
Sal y pimienta
Se rehoga la cebolla y el ajo hasta dorar y se retira del fuego. Se añade la bolsa de remolacha y el pepino y se tritura todo. Se añaden dos cucharadas de AOVE y se adereza con sal y pimienta al gusto. Se deja enfriar en nevera aproximadamente dos horas antes de servir.
SOPA FRIA DE SANDIA Y TOMATE: la sopa de sandia puede ser una de las opciones más refrescantes para el verano.
Sorprende por su sabor distinto al resto de sopas más convencionales y su poder hidratante.
RECETA:
Sandia (media sandia o tres cuartos)
Tomates maduros (dos o tres)
Menta en hojas
Una cucharada de jengibre en polvo
Una cucharada de AOVE
Pelamos los tomates y los cortamos, los ponemos a cocción unos 5 minutos. Batimos muy bien hasta que no queden prácticamente partículas. Cortamos un par de hojas de menta y añadimos la sandía. Batimos hasta obtener mezcla homogénea. Añadimos la cucharadita de jengibre en polvo y de AOVE y removemos bien. Dejamos enfriar en la nevera antes de servir. A la hora de servir podemos añadir hojas de menta fresca para decorar y aportar aroma al plato.